Noticia Breve, post demasiado largo

A veces, trabajar en un pequeño Hospital Comarcal en provincias tiene sus cosas… como recibir una de tus lecturas de cabecera con un día de retraso, y de repente, prestar atención a noticias como las de la foto, que en otro tipo de vorágine habrían pasado desapercibidas, noticias más breves que quien las generó hubiera deseado que fueran…

El CEEM tomó cuerpo y forma en la década de los Noventa, ésa que yo decidí pasar en “mi” Facultad, para hacer muchas cosas, entre otras, estudiar Medicina. Compartí despacho con algunos de sus Fundadores y algunas de sus primeras figuras destacadas están entre mis amigos. Resultó curiosa por ejemplo, la trayectoria que llevó a que la primera “E” de sus iniciales dejara de significar “Español” para pasar a ser “Estatal”: no emito juicios de valor, sólo traigo al presente un recuerdo del año 1991. En paralelo, se organizó una asociación con vocación similar a nivel Europeo, de cuya reunión fundacional en Bruselas fui testigo “indirecto”, pero ésa sería otra Historia…

IFMSA-Spain tiene unos orígenes inciertos, lo único seguro es que hubo una reunión de IFMSA-Internacional en Madrid en 1962, para la que se pidieron fondos públicos (¡para comprar una máquina de escribir, me contaron!), y que durante un cuarto de siglo fue el
proyecto, el esfuerzo y el sacrificio personal de muchos estudiantes del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, que establecieron su “red social” al estilo de la época, tanto hacia el exterior, como con otras Facultades de Medicina del Reino. Denominada hasta hace quince años como AIEME (Asociación de Intercambios de Estudiantes de Medicina de España), fue el primer miembro de pleno derecho de IFMSA International, y ha tenido un papel relevante en el liderazgo internacional de esa Organización, especialmente en los últimos veinte años. Actualmente es el representante español con derecho a voto (hasta donde recuerdo, sólo se permite un voto por Estado en el Sistema ONU, aunque pueden existir varios miembros asociados, que abonan la misma cuota, pueden presentar sus proyectos y socios a cargos elegibles, pero no tienen derecho a voto). AIEME (permitidme el rasgo romántico de llamarlos así) ha respondido desde hace cincuenta años “present” a la llamada a “Spain” en la rueda de países miembro y votaciones nominales de IFMSA, de manera ininterrumpida desde entonces, cumpliendo de manera leal y legítima con los principios fundacionales de la Federación Internacional para cuyos fines existe y sirve.

AECS es la denominación en IFMSA desde 1994 de lo que entró en su momento en el foro internacional como las Joventuts Mèdiques de Catalunya i Balears, aprovechando una época de crisis de organización y liderazgo en AIEME, desde 1984 es miembro asociado en IFMSA. En algún momento ha tenido derecho a voto como Andorra, desde el reconocimiento de este Estado en el Sistema ONU hacia 1993, y abonando dos cuotas (una como Andorra y otra como “Catalan Countries”). Se presentaban como sección estudiantil de la centenaria Academia. Hasta 1994, coexistían en Cataluña un capítulo de AIEME en la Universitat de Barcelona, y la propia AECS; la falta de continuidad en voluntarios de AIEME-Catalunya provocó una “muerte dulce” o una fusión por absorción, que se anunció en la Asamblea General de la Asociación Española en Santander en Octubre de 1994.

En esa época convulsa en la Europa de los ’90, que vio nacer o renacer viejos y nuevos Estados (y morir a demasiada gente), en muchos miembros de IFMSA se establecieron convenios de colaboración entre las organizaciones de estudiantes dedicadas a las Relaciones Internacionales equivalentes a AIEME o AECS, y las dedicadas a la representación política (¡que no politizada!), equivalentes al CEEM. La simbiosis estaba cantada: mientras que unos ponían el énfasis en determinados proyectos de movilidad de estudiantes y jóvenes  investigadores, de proyectos de ayuda humanitaria, de salud reproductiva o de promoción de una cultura de Paz y Salud, otros tenían el conocimiento y el interés centrado en el desarrollo curricular e intercambio de experiencias en la Educación Médica. Casos de éxito fueron los de Alemania, Noruega o Portugal, y algún conflicto de índole menor sucedió en Brasil, donde el órgano de representación oficial de los estudiantes arrastraba fama de vinculación a un determinado partido político, lo que llevó a la existencia de un segundo miembro en IFMSA, aunque por razones distintas a las de España.

“Nosotros”, “aquí”, intentamos y no fue difícil establecer la colaboración. En las Jornadas del CEEM en Sevilla en Octubre de 1993 se firmó un acuerdo de colaboración entre AIEME y el CEEM, ratificado por los órganos de máxima representación de ambos colectivos, en  línea similar a los alemanes. La colaboración en los años siguientes llegó al extremo de que el Vicepresidente para Educación Médica de la Junta Directiva de AIEME que sucedió a la que yo presidí, era la misma persona que quien detentaba las mismas tareas en el CEEM. Luego llegó el «6 = 0» y cambió demasiadas cosas, no todas para bien.

Una noticia breve como la del lunes puede traer muchas cosas a la memoria. Una Vicepresidente de mis equipos, con quien todavía comparto amistad y recuerdos, me enseñó a mirar lo hecho con satisfacción, y no sentirme implicado o dolido porque el paso del tiempo “mancillase” un supuesto legado. Dicho lo cual, aun sabiendo que es harto difícil que los decisores en ambas organizaciones me lean, me gustaría preguntar:

• ¿Es útil para los objetivos comunes establecer una doble representación, o entablar un conflicto sobre quién es más legítimamente representativo? ¿No podéis llegar a un acuerdo, chavales?
• ¿Es rentable para los asociados y representados que se abonen dos cuotas de membresía, que seguramente superen ya los 3000€ por Organización, a costa de las tarifas que se cargan a los federados, o de subvenciones que se puedan llegar a percibir para ello, y podrían destinarse a mejor fin?
• ¿Es necesario dar a nivel internacional la imagen de que no se puede hablar con una sola voz? No sólo eso sino que ¿Tan boyante es la economía del asociacionismo estudiantil en la España de 2011 que se podría permitir ser el único país con tres miembros federados?
• ¿Va a suponer que dos veces al año se enviarán dos delegaciones a dos reuniones internacionales en marzo y agosto, para duplicar la presencia de delegados en plenos, reuniones de presidentes, comisiones permanentes, en vez de tratar de abarcar cuanta más actividad mejor para adquirir más conocimiento que poder transferir a la vuelta?

El acuerdo que firmamos con Rafa (Presidente de CEEM desde su fundación hasta que acabaron las célebres huelgas de 1994-95) en Sevilla reconocía la realidad de cada uno de los colectivos en aquel momento: IFMSA-Spain aportaba la experiencia de treinta años ya por entonces, infraestructura y voluntarios en las Facultades, a menudo mayor que la de los propios consejos de representantes, y una red internacional en más de cincuenta países por entonces; el CEEM era el órgano que de manera colegiada reunía a los representantes democráticamente votados en cada Facultad, y legítimamente podía reclamar representar a todos ellos a nivel internacional. ¿Tan difícil es dejar esto en un papel que debería durar más de los seis años que se supone la vida de un estudiante de pregrado? ¿O hay algo más, alguna vanidad personal, algún prurito o interés no confesado? Me lo expliquen, por favor…

Noticia breve… post demasiado largo, como grande va siendo ya la memoria. El toque musical es de la época. Entonces lo cantaba con ilusión de lo que iba a ser, hoy tengo un motivo de pesimismo más para preguntarme si alguna vez será.

* El autor fue presidente de lo que ahora se conoce como IFMSA-Spain entre 1992 y 1994, y lo que ahora llaman vicepresidente de IFMSA International entre 1996 y 1997, para la redacción, además de su verborrea habitual, ha contado con el conocimiento y posibilidad de comentar este escrito con otros tres presidentes de IFMSA-Spain de distintas épocas, así como de otros miembros de Juntas Directivas, españoles que representaron a su Organización en el Executive Board y el Supervising Council de IFMSA International y miembros del Consejo de Representantes de distintas épocas posteriores a la suya.